Roberto del Santo

Roberto del Santo

Liberarse de lo tóxico

Tenemos la manía de vivir anclados a situaciones, personas y objetos que, sencillamente, son tóxicos para nosotros. No paro de verlo. Comenzando por mí. Hay una sinrazón aparente, pero lo cierto es que elegimos seguir con eso que no me gusta, pero conozco, que intentar si quiera, salir de lo que conozco. Nos puede más el miedo a lo desconocido que el miedo a sufrir en sí. Es más sencillo estar paralizado que moverse.

Tu propia conexión emocional

Para tener un estado equilibrado y beneficiarse de tu propia paz mental, después de tener claros cuales son tus propósitos, hay que poner la mirada interior hacia tus propias conexiones emocionales, hacia lo que hace que “hables” contigo en términos de vibración personal. Conocer tus ondas.

La gasolina de tu vida

Usando mi virtud de gran observador (alguna me queda todavía😊), percibo que, en general, las personas van con el piloto automático puesto, cuando hace tiempo que le dieron al botón del “tengo que”, sin darse el momento de pararse a vivir o dedicar un espacio a conocer a dónde van.

¿Sabes que inspiras a otros?

Llegará un momento en que alguien cercano, o tú, contarás tu propia historia. Y será inspiradora para alguien. Te has ocupado de ti porque los demás ya están ocupados en lo suyo. Y lo has hecho bien. No porque yo lo crea, lo digo porque a la luz de cómo está el mundo, tu historia es digna de mencionar.

Aflojar y dejar marchar

Me encanta cuando me fijo y veo en cómo realizas la oportunidad del cambio, la manera de aceptar lo que viene sin rechistar. Porque, aunque no te gusta, asumes lo que hay de forma estoica y admites que sigues siendo el hogar de tu nuevo constructo personal.  Te proporciona libertad y

Sigues siendo un portento

Eres una arquitecta de los pilares de tu vida, constructor de tu particular destino. A pesar de las enormes dificultades que han surgido en tu propio camino, has sido capaz de ser un ejemplo para otras personas, estoy convencido. Eres una auténtica fuente de inspiración

«Tempus fugit, memento mori»

Nos queda menos tiempo de estar aquí. Porque algún día se nos va a acabar esto de ir celebrando años nuevos. Más allá de lo que te apetezca o no escuchar, en el plano físico se intuyen carencias, si es que no las vamos acusando más o menos el común de los mortales. Y si lo vemos desde una línea temporal en la historia evolutiva, pues siento deciros que nos queda un estornudo.