Tus experiencias y pensamientos

Cada uno de nosotros influye en la realidad que ve, que experimenta, al incluir nueva información en nuestras células. Ya vimos que procesamos 200 veces menos de información que la recibida.  Y sobre eso te formas creencias y pensamientos.

Cada uno de nosotros influye en la realidad que ve, que experimenta, al incluir nueva información en nuestras células. Ya vimos que procesamos 200 veces menos de información que la recibida.  Y sobre eso te formas creencias y pensamientos. Tu mente trabaja como un ordenador casi nuclear asumiendo que esa realidad es única, porque es la que manejas tú.

De manera que el pensamiento afecta a las moléculas, al insertar una información que de forma consciente maneja, pero que de manera inconsciente desecha 200 veces más de información (ver anterior post). Cuando meditamos, puede llegar a suceder que entres en un estado de infinitas posibilidades. Se está muy por encima del mundo mental. Se transmuta a un estado personal donde puede experimentarse cualquier condición de índole vital. Se está fuera del alcance de la tiranía de los pensamientos, al quedar anulado el precepto que crea mi realidad subjetiva basado en el intelecto, y pasar a formar parte de esa otra realidad mucho más profunda. Se siente, se vive, se experimenta. No se piensa. Porque se es en toda su extensión y manifestación. En otro plano existencial. Esto ocurre en breves destellos de luz mientras ocurre el fenómeno de la meditación. A veces es muy profundo, intenso, lúcido. Sublime.

            Durante la practica de la meditación, ocurre que se insertan nuevas informaciones a nivel celular, nacidas de las nuevas experiencias surgidas a raíz de la práctica misma de la meditación. Por ejemplo, se influye en el lugar donde se reúnen determinadas sustancias químicas (péptidos) que se corresponden con determinadas emociones que experimentamos. Ocurre en una parte del cerebro, el hipotálamo.

Al meditar, se entra y prolonga un estado interior de profunda quietud mental y paz internas, por lo que se generan nuevas cadenas de aminoácidos llenas de esa nueva información celular, relacionadas con estados personales internos de elevado bienestar. Porque hay sustancias químicas para cada situación emocional. Esto genera nuevas experiencias químicas y celulares, y así sucesivamente, que conformarán tu particular experiencia de realidad más allá de lo que hasta ahora pensaba que “era” tu realidad. Descubres, por propia experiencia, que hay otras realidades más profundas y alejadas de nuestros cerebros. Y eso es lo que de facto, convertimos en nuestra verdad. Fascinante, ¿no?

Y tú, ¿Cuáles son tus pensamientos y experiencias? ¿Eres consciente?

El proyecto formativo sobre gestión emocional, terminado recientemente tras 12 semanas seguidas, a funcionarios de Policía Nacional, ha superado las expectativas creadas por parte de los dirigentes y de las mías personalmente como uno de los dos creadores. Mi proyecto despierta sigue triunfante. Ya me darás tu opinión. Gracias por tu apoyo.

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